La instalación de purificadores de aire o humidificadores personales en espacios compartidos dependerá de las normas y reglamentos específicos establecidos por el establecimiento u organización que gestiona el espacio. En algunos casos, puede permitirse siempre y cuando no interrumpa o plantee riesgos para la salud o la seguridad de los demás. Sin embargo, en otros casos, puede haber restricciones o pautas que prohíban el uso de purificadores de aire o humidificadores personales para mantener un ambiente constante y controlado. Es recomendable consultar con las autoridades correspondientes o la gestión del espacio compartido antes de instalar este tipo de dispositivos.
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