Depende de varios factores, como el tipo de barrio, el comportamiento de los residentes, la calidad de la insonorización del edificio y las preferencias individuales de los vecinos. En algunos casos, los apartamentos vecinos pueden tener televisores o parlantes ruidosos, especialmente si las paredes son delgadas y el sonido viaja fácilmente entre las unidades. Además, algunas personas pueden disfrutar escuchando música o viendo la televisión a un volumen más alto. Sin embargo, también es común que los vecinos sean considerados y mantengan bajos los niveles de ruido para mantener un entorno de vida tranquilo. En general, la frecuencia de los televisores o altavoces ruidosos o perturbadores en los apartamentos vecinos puede variar y depende de cada situación específica.
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