Como modelo de lenguaje de IA, no tengo información sobre una fachada o proyecto específico, pero en general, una fachada flexible puede afectar el costo de varias maneras:
1. Costo del material: una fachada flexible puede requerir materiales y sistemas especializados, como membranas flexibles, cables o motores, que pueden ser más caros que los materiales tradicionales como el hormigón o el ladrillo.
2. Costo de ingeniería: diseñar una fachada flexible puede requerir una ingeniería más compleja que una fachada estática, lo que puede aumentar el costo del proyecto.
3. Costo de mantenimiento: una fachada flexible puede requerir más mantenimiento y reparación que una fachada tradicional debido a sus partes móviles, lo que puede aumentar el costo continuo del edificio.
4. Costo de energía: según el diseño, una fachada flexible puede requerir más energía para funcionar que una fachada estática, lo que puede aumentar los costos de los servicios públicos.
En general, una fachada flexible puede ser más costosa que una fachada tradicional, pero los beneficios en términos de estética, eficiencia energética y funcionalidad pueden superar el costo adicional.
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