1. Derechos de propiedad intelectual: la arquitectura interactiva a menudo implica el uso de material protegido por derechos de autor, como software, imágenes, videos y música. Los arquitectos deben asegurarse de tener las licencias o permisos adecuados para usar estos materiales.
2. Privacidad y protección de datos: la arquitectura interactiva que implica la recopilación de datos de los usuarios debe cumplir con las leyes de protección de datos. Los arquitectos deben respetar la privacidad de los usuarios y asegurarse de que los datos se recopilan y utilizan de forma ética y legal.
3. Accesibilidad: la arquitectura interactiva debe ser accesible para todos los usuarios, incluidos aquellos con discapacidades. Los arquitectos deben seguir las pautas de accesibilidad y asegurarse de que todos puedan usar la plataforma o herramienta.
4. Responsabilidad: los arquitectos deben ser conscientes de los posibles riesgos y responsabilidades asociados con la arquitectura interactiva. Deben tomar medidas para evitar daños a los usuarios y garantizar que sus diseños sean seguros y confiables.
5. Obligaciones contractuales: los arquitectos deben cumplir con las obligaciones contractuales y los acuerdos con clientes, socios y proveedores. Deben asegurarse de cumplir con los términos del contrato y cumplir con los entregables acordados.
6. Cumplimiento normativo: la arquitectura interactiva puede estar sujeta a requisitos de cumplimiento normativo, como códigos de construcción, normas ambientales y estándares de seguridad. Los arquitectos deben cumplir con estas normas y asegurarse de que sus diseños se ajusten a ellas.
7. Infracción de los derechos de autor: los arquitectos deben asegurarse de que sus diseños o contenidos no infrinjan los derechos de autor de otras partes. Deben tener cuidado al usar materiales que tienen derechos de autor de otras partes.
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