El estilo bizantino es importante en el desarrollo del arte moderno, ya que influyó en el arte del Renacimiento y los períodos posteriores. El arte bizantino era principalmente religioso y simbólico, con uso de colores vivos, pan de oro y figuras bidimensionales aplanadas. Estas características estilísticas se pueden ver en las obras de muchos artistas del Renacimiento como Giotto, que se inspiró en los mosaicos bizantinos, y Leonardo da Vinci, que estudió la iconografía bizantina. El arte bizantino también tenía un fuerte énfasis en los detalles y patrones, lo que se puede ver en las obras del Art Nouveau y otros movimientos de arte decorativo. La influencia bizantina también se puede ver en el arte religioso moderno, como en las obras de Marc Chagall y Gustave Moreau. En general, el estilo bizantino ha tenido un impacto significativo en el desarrollo del arte moderno y continúa inspirando a los artistas de hoy.
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