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El diseño computacional ciertamente puede desempeñar un papel para abordar la escasez de unidades de vivienda sostenibles y asequibles. Al aprovechar la tecnología y los algoritmos, el diseño computacional puede ayudar a agilizar los procesos de diseño y construcción, haciéndolos más eficientes, rentables y respetuosos con el medio ambiente. Por ejemplo, los modelos de diseño generados por computadora pueden permitir a los arquitectos e ingenieros explorar una amplia gama de opciones de diseño e identificar soluciones óptimas que cumplan con los requisitos tanto estéticos como funcionales. De manera similar, el diseño computacional puede ayudar a optimizar los materiales de construcción y las técnicas de construcción para minimizar los desechos y reducir el impacto ambiental de la construcción de viviendas.
Un ejemplo de cómo se utiliza el diseño computacional en viviendas asequibles y sostenibles es el "Sistema de construcción abierta" del Open Building Institute. Este sistema utiliza herramientas de diseño computacional para crear diseños de edificios modulares y personalizables que se pueden ensamblar fácilmente en el sitio, lo que reduce los costos y los plazos de construcción. Los diseños también están optimizados para calefacción y refrigeración solar pasiva, minimizando el consumo de energía y reduciendo la huella de carbono de las unidades de vivienda.
Sin embargo, si bien el diseño computacional puede ser una herramienta valiosa para abordar la escasez de viviendas asequibles, no es una panacea. Otros factores, como la política gubernamental, los mecanismos de financiación y la participación de la comunidad, también son fundamentales para crear unidades de vivienda sostenibles y asequibles.
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