Los edificios marroquíes se han diseñado tradicionalmente para aprovechar la ventilación natural para crear un ambiente interior confortable. Aquí hay algunas formas en que lo logran:
1. Patios abiertos: los edificios marroquíes a menudo cuentan con patios centrales abiertos, conocidos como "riads", que actúan como el núcleo de la casa. Estos patios proporcionan un espacio para la circulación del aire y permiten el flujo de aire fresco desde el exterior hacia los espacios interiores. También facilitan la salida de aire caliente, manteniendo una temperatura confortable.
2. Calles estrechas y alta densidad de edificios: las ciudades marroquíes son conocidas por sus calles estrechas y edificios de alta densidad. Esta estrategia de planificación urbana crea pasillos estrechos y sombreados que pueden atrapar el aire fresco, haciendo que las calles y los edificios sean naturalmente más frescos.
3. Torres de viento (Badgirs): Las torres de viento son elementos arquitectónicos que se pueden encontrar en los edificios marroquíes, especialmente en las regiones desérticas. Estas estructuras altas capturan el viento desde diferentes direcciones y lo dirigen hacia el interior del edificio. El flujo de aire crea un efecto refrescante y mejora la ventilación en todos los espacios interiores.
4. Ventanas Mashrabiya: Mashrabiya es un tipo de celosía de madera integrada en las ventanas de los edificios marroquíes. Estas pantallas permiten la circulación del aire al tiempo que brindan privacidad y protección contra el sol. Los intrincados patrones de la mashrabiya ayudan a difundir el calor y dirigir el flujo de aire hacia el interior.
5. Techos altos y paredes gruesas: Los edificios marroquíes suelen tener techos altos y paredes gruesas, que ayudan a regular la temperatura. Los techos altos permiten que el aire caliente suba y se acumule lejos de los espacios habitables, mientras que las paredes gruesas proporcionan aislamiento y reducen la transmisión de calor.
6. Terrazas y balcones: Muchos edificios marroquíes tienen terrazas y balcones, que sirven como espacios de vida al aire libre. Estas características permiten disfrutar del aire fresco y proporcionan ventilación cruzada cuando se abren puertas y ventanas.
En general, los arquitectos marroquíes han integrado varios elementos de diseño que promueven la ventilación natural, permitiendo un ambiente interior más fresco y confortable en un clima cálido.
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