Un sistema geotérmico para la construcción de edificios es un tipo de sistema de calefacción y refrigeración que se basa en el calor natural almacenado en la tierra para regular la temperatura interior. El sistema consiste en una serie de tuberías subterráneas llenas de un fluido que absorbe el calor de la tierra y lo transporta al edificio, donde se utiliza para calentar el aire o el agua. En el verano, el proceso se invierte, con el sistema extrayendo calor del edificio y depositándolo nuevamente en la tierra, enfriando efectivamente el ambiente interior. Los sistemas geotérmicos son conocidos por su eficiencia energética, confiabilidad y longevidad, y se utilizan cada vez más en la construcción residencial y comercial como una forma de reducir los costos de energía y el impacto ambiental.
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