La claridad es una característica esencial de la arquitectura neoclásica. Enfatiza la pureza geométrica de las formas, el sentido del orden, el equilibrio y la proporción en su diseño. Valora la sencillez y la claridad de expresión por encima de la decoración, la ornamentación y el exceso de detalle. La claridad en la arquitectura neoclásica crea una sensación de legibilidad y comprensión del propósito y función del edificio, mejorando la experiencia del usuario. Esta característica también refleja los valores intelectuales y morales de la Ilustración que inspiró el neoclasicismo, que enfatizaba la importancia de la racionalidad, la claridad y la simplicidad del diseño como componentes esenciales de la belleza y la funcionalidad. Por lo tanto, la claridad ayuda a comunicar el lenguaje arquitectónico del neoclasicismo, creando un estilo que es tanto intelectual como estéticamente agradable.
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