Un muro cortina es un sistema de revestimiento exterior que está diseñado para proteger un edificio de las inclemencias del tiempo y permitir la entrada de luz natural. Por lo general, está hecho de paneles de vidrio y metal o piedra.
Los muros cortina funcionan uniendo los paneles de revestimiento exterior o los paneles de vidrio a un marco estructural o sistema de carga que está separado del edificio mismo. Esto permite que el muro cortina sea independiente de la estructura del edificio y proporciona flexibilidad en términos de diseño.
El muro cortina también suele incluir juntas y sellos que ayudan a evitar la infiltración de agua y aire. Además, a menudo incluye componentes adicionales como aislamiento y una barrera de vapor para ayudar a mejorar la eficiencia energética.
En general, un muro cortina proporciona una apariencia elegante y moderna a un edificio al mismo tiempo que brinda protección y eficiencia energética.
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