La teoría del aprendizaje situado es una perspectiva que sugiere que el aprendizaje ocurre a través de contextos sociales y culturales. Esta teoría asume que el conocimiento no es solo un proceso cognitivo, sino que también está influenciado por factores sociales y ambientales. De acuerdo con esta teoría, adquirir conocimiento en un entorno particular es mucho más efectivo que aprenderlo en un contexto general. Argumenta que los alumnos se involucran en actividades que están alineadas con la cultura y el contexto en el que se encuentran. En este sentido, el aprendizaje tiene lugar en situaciones del mundo real y no en entornos controlados como las aulas. La teoría del aprendizaje situado enfatiza la importancia del contexto y el papel que juega en la configuración de las experiencias de aprendizaje.
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