Los muros de carga son un componente esencial de la integridad estructural de un edificio y soportan el peso del techo y los pisos superiores. Estos muros deben construirse para soportar el peso del edificio y transferirlo a los cimientos. Los muros sin carga, por otro lado, se utilizan para dividir espacios dentro de un edificio y no son necesarios para la estabilidad estructural del edificio. Estas paredes se pueden quitar o modificar sin afectar la integridad del edificio.
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